Hay veces que te das cuenta que lo que tu creías blanco, resulta ser negro, eso es precisamente lo que me ha pasado a mí, tenía una idea equivocada de ciertos aspectos que forman parte de mi vida, yo no se si soy muy bueno , muy malo o muy tonto, pero al final me las llevo todas del mismo lado.
Hablo subjetivamente, siempre he intentado mantenerme al margen de polémicas y trifulcas, la verdad es que algunas veces no lo he conseguido porque siempre, sin comerlo ni beberlo, me veo salpicado.
Cuando otros proponen, yo acato, pero cuando yo propongo, poco menos que se me ignora, que le vamos a hacer, soy así. Pero hace unos días me he llevado una profunda decepción, cosas que yo, durante años, he intentado dejar al margen, en unos meses, otros, las han introducido de manera irrevocable, y lo malo es que han conseguido sembrar la duda y el mal rollo.
Durante muchos años se han llevado las cosas como otros han querido, sin consultar con nadie y todo el mundo encantado y sin rechistar, pero ahora, cuando se da la oportunidad de opinar, todo está mal y todos a protestar, de otros lo puedo comprender, pero de algunos a los que yo creía firmes en sus convicciones, no.
Además las decisiones que han tomado, me han dejado muy tocado, pero, en fin, mi vida es así y tengo que aceptarla, yo desde luego seguiré siendo igual, no se si muy bueno, muy tonto o muy malo, ustedes juzguen.